El descubrimiento del trastorno bipolar se
hizo alrededor del año 400 AC. Hipócrates hizo una conexión entre la melancolía
y la manía. Aunque este es el primer escrito sobre el descubrimiento de un
trastorno bipolar, fue en gran parte inexplorada por otros durante este período
de tiempo. Esto fue en parte debido a que las enfermedades mentales tienen más
calidad de superstición en ellos, sin causa conocida o cura, ya que no se
consideraba que tenían una base médica.
De 300 a 500 DC se sabía
poco sobre que es la bipolaridad. Se creía que las personas que lo sufrían
tenían problemas graves tales como la mala sangre o incluso la posesión
demoníaca. Dado que este trastorno todavía no se creía de origen médico, los
pacientes estaban encadenados, expuestos a derramamiento de sangre, siendo
prescritos con “pociones mágicas” e incluso condenados a muerte consideradas
como misericordiosas.
DESCRIPCION DE LA BIPOLARIDAD
El trastorno bipolar o trastorno
afectivo bipolar es
una psicosis
maníaco-depresiva que
se caracteriza por la alternancia de períodos de euforia y excitabilidad
(manía) y períodos de depresión. El paso entre un estado y otro puede ser abrupto.
Como TAB también se conoce a este mencionado trastorno mental que
se considera que aparece en una persona básicamente por dos razones. Por un
lado, estaría el factor exógeno, que puede ser el conjunto de sentimientos de
estrés o ansiedad, y por otro lado, nos encontraríamos con elementos de
hereditario. Así, se ha determinado que más de los dos tercios de individuos
que sufren esta patología cuentan en sus antecedentes familiares con alguna
persona que también ha sufrido la misma.
SINTOMAS
La
fase maníaca puede durar de días a meses y puede abarcar los siguientes
síntomas:
·
Distraerse fácilmente
·
Poca necesidad de sueño
·
Deficiente capacidad de
discernimiento
·
Control deficiente del
temperamento
·
Comportamientos
imprudentes y falta de autocontrol, como beber, consumir drogas, tener
relaciones sexuales con muchas parejas, hacer gastos exagerados
·
Estado de ánimo muy
irritado como pensamientos apresurados, hablar mucho, creencias falsas acerca
de sí mismo o de las habilidades
·
Compromiso exagerado en
actividades
El
episodio depresivo puede incluir estos síntomas:
·
Tristeza o estado de
ánimo bajo diariamente
·
Dificultad para
concentrarse, recordar o tomar decisiones
·
Problemas en la
alimentación como inapetencia y pérdida de peso o consumo exagerado de
alimentos y aumento de peso
·
Fatiga o desgano
·
Sentimiento de
minusvalía, desesperanza o culpa
·
Pérdida de placer en
actividades que alguna vez disfrutaba
·
Pérdida de la autoestima
·
Pensamientos de muerte o
suicidio
·
Dificultad para
conciliar el sueño o dormir demasiado
·
Alejarse de los amigos o
las actividades que alguna vez disfrutaba
Las personas con trastorno bipolar están en alto
riesgo de cometer suicidio.
Pueden consumir alcohol u otras sustancias en
exceso, lo cual puede empeorar los síntomas y el riesgo de suicidarse.
Los
episodios de depresión son más frecuentes que los episodios de manía. El
patrón no es el mismo en todas las personas con trastorno bipolar:
·
Los síntomas de depresión
y manía pueden ocurrir juntos, lo cual se llama estado mixto.
·
Los síntomas también
pueden ocurrir inmediatamente uno después de otro, lo cual se denomina un ciclo
rápido.
CURAS
El objetivo principal del tratamiento es:
·
Hacer que los episodios
sean menos frecuentes e intensos.
·
Ayudar a que usted se
desempeñe bien y disfrute la vida en casa y en el trabajo.
·
Prevenir la autoagresión
y el suicidio.
MEDICAMENTOS
Los
medicamentos son una parte fundamental del tratamiento del trastorno bipolar.
Casi siempre, los primeros medicamentos utilizados se denominan estabilizadores
del estado de ánimo, los cuales le ayudan a evitar los altibajos en el estado
anímico y los cambios extremos en la actividad y el nivel de energía.
Con
medicamentos, es posible que empiece a sentirse mejor. Para algunos, los
síntomas de manía pueden sentirse bien o se pueden presentar efectos
secundarios de los medicamentos. Como resultado de esto, usted puede verse
tentado a dejar de tomar sus medicamentos o cambiar la forma como los está
tomando. Pero dejar de tomar sus medicamentos o tomarlos de la manera
incorrecta puede provocar que los síntomas reaparezcan o que lleguen a ser
mucho peores.
Los
miembros de la familia o los amigos pueden ayudarle a tomar los medicamentos de
la manera correcta. Además, pueden ayudar a verificar que los episodios de
manía y depresión sean tratados tan pronto como sea posible.
Se
pueden ensayar otros medicamentos, como los antipsicóticos o los
antidepresivos.
Las
visitas regulares con un psiquiatra para hablar acerca de sus medicamentos y
los efectos secundarios son necesarias. Los exámenes de sangre a menudo también
son necesarios.